“LOS HÉROES DEL CRUCERO GENERAL BELGRANO”
A los 6 años nos conocimos en el primer grado del colegio “Nuestra
Señora de Lourdes” de Mariano Acosta , en la provincia de Buenos Aires .
Vicente Genaro era muy charlatán , extrovertido y estudioso. Buen
alumno y mejor amigo . Fuímos compañeros hasta 7° grado . Siguió la
secundaria en la misma escuela , mientras yo “emigraba” para hacer el
bachillerato en Marcos Paz. De todos
modos no perdimos la amistad ya que solíamos visitarnos o nos cruzábamos
frecuentemente porque el pueblo es demasiado chico como para no verse
por mucho tiempo . Cuando terminó tercer año entró a la Escuela Naval
Militar de Río Santiago , por influencia de su tío Ernesto Mastrolorenzo
, por entonces suboficial principal . Su decisión hizo que dejaramos de
vernos , pues se quedaba en el Barrio Naval cercano a la base donde
vivía su tío . El “Tano” era marinero …
Los 1093 tripulantes del crucero General Belgrano se aprestaban a soportar el mal clima. Nubarrones, oscuridad, vientos fuertes. Era 2 de mayo de 1982, por la tarde, en plena Guerra de Malvinas. Sin previa alerta, el buque se sacudió violentamente. Se sintió una tremenda explosión y se cortó la energía. De pronto, comenzó a elevarse por una de las puntas, cuando se escuchó una segunda explosión: faltaban 15 metros de barco en la proa. El fuego y el olor a quemado invadieron a los marinos argentinos.
Los 1093 tripulantes del crucero General Belgrano se aprestaban a soportar el mal clima. Nubarrones, oscuridad, vientos fuertes. Era 2 de mayo de 1982, por la tarde, en plena Guerra de Malvinas. Sin previa alerta, el buque se sacudió violentamente. Se sintió una tremenda explosión y se cortó la energía. De pronto, comenzó a elevarse por una de las puntas, cuando se escuchó una segunda explosión: faltaban 15 metros de barco en la proa. El fuego y el olor a quemado invadieron a los marinos argentinos.
En medio del caos ensordecedor y la oscuridad, comenzaron a utilizarse
las balsas salvavidas. Los heridos se contaban por todas partes, siendo
llevados en hombros por quienes conservaban el equilibrio, cuando el
barco alcanzaba una inclinación ya de 20 grados y era necesario
agarrarse de cuanto estuviera amarrado a la estructura, hasta que sin
demora, se escuchó el grito de “¡Abandonen el buque!” y, minutos más
tarde, mientras el hundimiento proseguía, con ruido de explosiones y una
humareda blanca que se perdía en el cielo cada vez más oscuro, desde
las balsas que habían podido alcanzarse se escuchaba: “¡Viva el
Belgrano!”
A mediados de marzo de 1982, el Crucero ARA General Belgrano, con 44
años de funcionamiento y convertido en buque insignia de la Flota de
Mar, se encontraba en mantenimiento, luego de un largo viaje, cuando le
fue anunciado el alerta de la posible guerra con los ingleses. A poco de
que las tropas argentinas pisaran suelos malvinenses, el 16 de abril,
el buque zarpó hacia Islas de los Estados, en las aguas de Ushuaia, a
fin de defender la línea de la costa, vigilar los accesos desde el sur a
la zona de las islas e interceptar la flota enemiga de ser requerido.
Mientras tanto, se aceleraba el entrenamiento y prueba de artillería. No
faltó tampoco un nuevo atraque en puerto de Ushuaia y la asistencia,
luego, de dos destructores y un buque petrolero de YPF.
El primer día de mayo, el crucero se encontraba rumbo a posiciones de
guerra, pero en la mañana del 2 las órdenes fueron cambiantes, llamando a
tomar posición de espera, al sur de las islas, fuera del área de
exclusión declarada por Gran Bretaña. No obstante ello, el gobierno
inglés da órdenes al submarino atómico Conqueror de torpedear y hundir
el crucero General Belgrano. En su hundimiento, fallecieron 323
personas, casi la mitad del total de muertos argentinos en la guerra. El
Informe Rattenbach, en su último párrafo, indica: "Al Reino Unido,
vencedor de la contienda, le queda hoy el análisis desapasionado de su
conducta durante el conflicto (...) De este análisis surgirá, a no
dudarlo, el hecho intrínsecamente cruel por innecesario, cual fue el
hundimiento del Crucero ARA General Belgrano. Su responsabilidad por
este acontecimiento, además de otros de menor cuantía, es insoslayable".
El Comunicado de la Cancillería decía : “Alevoso acto de agresión
armada. En nombre del Gobierno, la Cancillería dio ayer, a las 21.45, el
siguiente comunicado sobre el ataque británico al crucero argentino
General Belgrano:“El Gobierno de la República Argentina, ampliando lo
informado por el Estado Mayor Conjunto en su comunicado Nº 15, hace
saber : ”1) Que a las 17 horas del 2 de mayo el crucero ARA General
Belgrano fue atacado y hundido por un submarino británico en el punto
situado a los 55º 24’ de latitud Sur y 61º32’ de longitud Oeste. La
dotación del buque es de 1042 hombres. Se están llevando a cabo
operaciones de rescate de sobrevivientes. 2) Que dicho punto está
situado a 36 millas fuera de la zona de exclusión marítima fijada por el
gobierno de Gran Bretaña en la declaración de su Ministerio de Defensa
del 28 de abril de 1982, ratificando lo dispuesto el 12 de abril de
1982. Esa zona está demarcada por un “círculo con radio de 200 millas
náuticas a partir de los 51º40´ de latitud Sur y 59º30´ de longitud
Oeste, según reza la declaración. Violación. 3) Que tal ataque
constituye un alevoso acto de agresión armada perpetrado por el gobierno
de Gran Bretaña en abierta violación de la Carta de las Naciones Unidas
y del cese de hostilidades ordenado por la Resolución 502 del Consejo
de Seguridad de la ONU. 4) Que, ante esta nueva agresión, la República
Argentina reitera ante la opinión pública nacional y mundial su
acatamiento al cese de hostilidades dispuesto por el Consejo de
Seguridad en la resolución mencionada. Solamente se ha limitado a
responder los ataques de Gran Bretaña, sin emplear la fuerza más allá de
lo estrictamente necesario para asegurar la defensa de sus
territorios."
Al mediodía siguiente del hundimiento del Belgrano una amiga en común,
Graciela Lucas, llega desesperada para darme la noticia : “En el “barco”
que hundieron ayer estaba Vicente , me lo acaban de informar en la
escuela” . Fuimos hasta la florería de su padre y no encontramos a
nadie. Tampoco en su casa . El pueblo todo conocía la noticia y
comenzaron los rumores nada alentadores … Sus padres se instalaron en
Río Santiago esperando y desesperando … Aquí , como suele ocurrir en
todos los pueblos ante casos tan tremendos , al no haber novedades
comenzaron a circular los peores comentarios … La tarde del 9 de mayo
de de 1982 era fría y una llovizna leve la hacía más triste aún … De
pronto se escucha un alarido desesperado y el vecindario salió a la
calle casi por completo … Un hombre en bicicleta gritaba con su tonada
italiana que apenas dejaba entender sus palabras : “MI VICENTE ESTÁ VIVO
… MI VICENTE
ESTÁ VIVO” … Era Luigi que preso de la emoción y la locura
nos hacía participes de su felicidad … El “Tano” volvió al mes dejando
la marina para siempre … Todos los años , el 2 de mayo lo llaman de las
radios , pretenden hacerle homenajes , lo invitan a los actos
conmemorativos , pero nunca asiste … No habló nunca más de aquella
vivencia imborrable … Nosotros tampoco le preguntamos nada porque
respetamos su silencio … Para él es el mejor homenaje para sus camaradas
, quienes cada noche rondan por su mente … Lo dijo su padre una vez que
charlamos un poquito sobre el tema …
Todos los días nos vemos porque tiene el negocio cerca de casa … Habla muy poco y vive “refugiado” en su esposa e hijos … Todos respetamos su decisión porque nunca más volvió a ser el mismo , y entendemos que de aquello no se vuelve … Hoy tiene su negocio cerrado como cada 2 de mayo , para él es un día de duelo … Para nosotros también debe serlo , porque 323 Vicente’s jamás volvieron …